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Tiendas en las que encontrar Lirio de Sangre

He empezado a llevar Lirio a las tiendas a las que tengo acceso y voy a hacer una lista para que sepáis dónde podéis pillarlo. AVISO: Só...

domingo, 27 de enero de 2013

De Pashamanen a Yaihamanen

Interrumpimos la emisión (larga de narices) de la rueda de prensa porque esta noche pasamos de Pashamanen a Yaihamanen.

Pasha = Madre
Yaiha = Padre
Manen = Mes

Así que pasamos del mes de la Madre, Pashaev o Dajaev, al del Padre, Yaihaev o Dajaven.

Daja = Dios
-ev = divinidad feminina
-ven = divinidad masculina

De modo que sí, Dajaev y Dajaven resultan un tanto redundantes *se encoje de hombros*


"-Señorita, si me permite decírselo... va usted a agobiar a sus lectores con tanto término.

-Falacias. Se acostumbrarán -exclamó Theudis

-Anda, pero si tenemos aquí al Rey de Reyes, ¿a qué debo tal honor?

-A que vas a hablar de tricadeca, es decir, cultura y religión theudiana. Por cierto, ¿qué eso de que no quieres aceptar el título de Marquesa?

-Ahora no, Theudis. Estoy liada friendo cerebros.

-Tú vete pensándotelo. Y convence a Casandra, que...

-¡Ssssh! Como spoilees de poco te va a valer ser el Rey de Reyes.

-Hum... pero pensáoslo."


Antes de meterme en harina con Yaihamanen, quiero dar por terminado Pashamanen recopilando las obras que se han creado por ello (en realidad por el concurso del deviantArt).

Por el Día de las Bromas (luna nueva de Pashamanen, cuando Lahnuven, el Loco, le roba el poder a Dajaev por un día), dos relatos:

-La mujer de pocas palabras (con un FOBOS y una buhonera que no es de fiar... Una civil trolleando a un Doberman tiene delito XD)

-Noche de espanto (con oscuridad, paranoia y colmillos; y cuyo título me hizo gracia porque acababa de ver Noche de Miedo, una especie de Ventana Indicreta con vampiros XD)

Por Yaihamanen, un relato:

-Alanbanza a Pashaev, Diosa Madre (ambientada en tiempos de Theudis por el sentimiento que le pone el pastor)

Dos dibujos:

-The mother

-Godess

Y un dibujo con fábula (¡dos en uno! :D)

-Dajaev, la Madre (con fábulas como ésta, la triscadeca le da mil vueltas a algunos delirios de la Biblia)

Y fuera de concurso, un relato mío (no sé, me parecía que tenía ventaja y que era mejor no participar XD):

-Lección 1: Dajaev (con distintos niveles de lectura, desde fábulas de la triscadeca a personajes ya conocidos en otro momento de sus vidas, pasando por discutir qué hizo realmente Theudis)


"-¿Qué quieres decir con eso de "qué hizo realmente Theudis"?

-Si te cargaste a la competencia y tal -respondió la Escritora como si nada.

-Aaaaah, eso. Me pregunto para qué escribí Confieso si luego nadie me cree -murmuró fastidiado.

-Lo que la gente no se cree es que "tú" escribieras un libro 9 siglos después de tu muerte.

-Eso es porque-

-Ejem, ejem -le interrumpió con mirada fulminante.

-Sí, nada de spoiler. Pero yo creo que es bastante evidente... Está claro que la educación se ha degradado mucho desde mis tiempos."


Aviso respecto a los relatos: Silva y daSilva no son el mismo apellido, ni siquiera familia lejana. Pero todas las Silva que salgan en diferentes relatos, sean míos o de otros, se referirán a la misma familia.

Y ya podemos dar por cerrado Pashamanen y dar la bienvenida a Yaihamanen.

Voy a dar algunos datos sobre Dajaven, poca cosa, que no quiero comeros el tarro (y tampoco es que tenga mucho).

Principalmente, Dajaven es la contrapartida de Dajaev. Si ella es íntima, hogareña y calmada, él es abierto, un aventurero y con mucho brío. Si ella es juiciosa cual petulante elfo, él es temperamental cual gruñón enano.


"-Eeeeey, que me voy para el Señor de los Anillos sin quererlo.

-Extraña forma tienes de explicar mi cultura -consideró Theudis sentado con chulería en un trono de oro y seda roja, con la diestra apoyada en un bastón de ébano y plata.

-Mientras les sirva para hacerse una idea..."


Dajaven encarna el coraje, el honor (en plan de caballero, que Dajaev tiene otro tipo de honor), el brío, la acción, la aventura...

A él están consagradas las academias de lucha y de diplomacia, los institutos donde se recogen lo descubierto por los exploradores, el ministerio de Asuntos Exteriores, las armerías y, cómo no, todo lo referido a la Guerra. Ah, y todo hombre, marido y padre (de la raza que sea, que estamos en Lirio. Y con raza me refiero a humanos, vampiros, licántropos, hadas, sirenas...blablabla)

Ahora que lo pienso... algún día hablaré de cómo funcionan las bodas en la triscadeca. A mí me parece algo bastante bonito.

Si Dajaev pecaba de obsesiva y controladora y, por ello, en luna nueva de su mes, Lahnuven le robaba el mando y convertía el mundo en un caos moderado... Dajaven puede pecar de temperamental, de dejarse llevar por sus impulsos sin pensar, abusando de la fuerza cuando no es momento y recurriendo a la violencia cuando no es necesaria ni justificada.
Por ello, en la luna nueva de Yaihamanen (el 10 de febrero este año, coincidiendo con el Año Nuevo chino, por cierto) se celebra una fiesta de recogimiento, pacífica, hogareña y familiar; o solitaria si se prefiere. Ante todo, es un día para la paz, la calma y la meditación.
Este día se escenifica cómo Dajaev llama a la calma a su marido y con ayuda de Bellenev le hace reflexionar sobre sus acciones. Que tenga cuidado con que su ardor a la hora de combatir a los Alazarian (los Demonios) no perjudique a inocentes.

Yaihamanen durará desde hoy, 27 de enero, hasta el 25 de febrero. El 26 entrará Bellemanen.

Y creo que con esto ya hay suficiente para ser la primera vez del Padre.

En el grupo de Lirio de Sangre del DA organizaré mañana (hoy más tarde) los concursos correspondientes a Yaihamanen.

Laotgor.

"-Y otra entrada más para el blog.

-Espero que tus lectores sean conscientes del valor de la triscadeca, crean o no en dioses.

-¿Y si no qué? ¿Qué harás si no son conscientes de su valor? ¿Con qué poder les harías cambiar de parecer?

-Alazarian... ¿Cuándo voy a recuperar mi poder? Estoy cansado de estar en la sombra viendo como mi imperio se va al carajo por culpa de incompetentes.

-Esto... Theudis, eres un personaje, surgido de mi imaginación, tu no...

-¡Minucias!"

viernes, 25 de enero de 2013

Rueda de prensa 5

"-Ya se le estaba haciendo tarde, señorita.

-Ya, con eso de tener que pedir correos electrónicos a un buen puñado de gente y de mandar casi 60 emails... me lié. Y anoche tenía que pasar a word la sexta parte de Una Terapia Peligrosa para subirlo hoy.

-¿Y que noticias trae de Lirio?

-Que unos cuantos me han respondido que el regalito les ha gustado -respondió alegre.

-Me refería a la edición física.

-Ah, pues sigo esperando el presupuesto para Odisea. Sigo corrigiendo Olvido... Ah, y también subí el primer capítulo, Marcada, para celebrar el aniversario de Odisea en papel. Es bastante spoileante para quien no se haya leído el primer tomo. Ummm... y he estado escribiendo Locura, 12º capítulo. Y creo que hace honor a su título.

-Excelente. Adelante pues con la rueda de prensa. A ver con qué alardes de demencia nos sorprende hoy.

-No creo... Las preguntas que tocan son bastante normalitas..."


-Todo a sus puestos. El que no se dé prisa, se queda fuera. Vamos, vamos. ¿Siguiente pregunta?

La Okupa levanta la mano.

-¿A quién va dirigida, a otro preso hormonado y con la lengua larga?

-No, es para David.

-Ah, bien -la Escritora controla una mueca rara-. David, asómate, anda.

-¿Sí? -aparece entre la multitud con una de sus radiantes sonrisas de niño bueno.

-¿Qué significa para ti cierta camarera de Ergat?

-¿Carol? -su sonrisa brilla un un poco más, no por dientes refulgentes como la piel de Edward, es algo del aura-. Es una amiga. Una buena amiga.

-Yaaaaa, claaaaaro. Amiiiiga -la Okupa arrastra las palabras.

-Bueno... No sé qué puedo decir sin que sea spoiler -le lanza una mirada a la Escritora, que tiene cara de que se ha metido en terreno cenagoso-. Es una amiga. Con ciertos... "privilegios". No sé si me explico -David deja ciega a la Okupa con su sonrisa radiante y sus ojos aguamarina.

-He oído rumores de que la camarera tiene líos por ahí...

-Estás muy enterada tú, ¿no? -pregunta el angelito, mientras la Escritora resopla por lo bajo.

-Uy, a mí eso me ha sonado a "sabes demasiado, ahora tendré que matarte" -interviene Casandra con su habitual humor macabro.

David ríe divertido e inocuo.

-No, yo no. Si se va de la lengua, será la jefa la que la liquide -responde risueño.

-Es que es muy buena amiga mía. Como Klakla -se justifica la Okupa.

-¡Kla! -pía la aludida.

-Y como la del furru-furru, que no está aquí porque nadie la conoce -añade la Okupa.

-Que nadie la conoce... -masculla la Escritora para sí misma-. Hace dos años el Deviant estaba petado de dibujos de ella y su esclavo, tanto que hubo quien se pensó que era la protagonista de la historia.

-Que os den -les grita la voz de cierta vampiresa desde el fondo.

-¿Quieres que te dé yo a ti, nena? -pregunta el pervertido de la lengua larga.

-Acércate y te despellejo y me hago un abrigo contigo -amenaza ella.

-Ey, dejad vuestras peleas para el 6º libro, que es cuando os conocéis -les corta la Escritora.

-Prima de Rotterdam es la tía de los colmillitos y el furru -se le escucha rumiar a Bufo.

-Bueno, ¿entonces yo ya he respondido a mi pregunta? -quiere saber David, que ni se ha inmutado con la violenta disputa.

-Sí, supongo que sí -acepta la Okupa, no muy convencida.

-Pues vamos a por la siguiente preg-

-¡¿PERO VAIS EN SERIO O NO?! -exclama de repente la Okupa.

-¿A qué te refieres con eso? -la sonrisa de David se vuelve un milímetro más misteriosa y la Escritora se tensa peligrosamente.

-Si vais a formar familia. Compromiso -aclara la Okupa-. Si sois novios serios o picaflores.

David suelta una carcajada cantarina.

-Verás, yo te respondería. Pero tengo la corazonada de que voy a quedarme mudo dentro de nada -responde como si no le afectara la pesada aura anti spoilers de la Escritora-. Si quieres, podemos hablarlo en privado -propone y su sonrisa se vuelve dos milímetros más maliciosa.

La Escritora tose significativamente y David recupera de golpe su luminosidad. La Okupa capta la indirecta y deja de insistir.

-Siguiente pregunta -retoma la Escritora, relajándose un poquito.

El chaval de la perilla, aquel que, en anteriores capítulos, se atrevió a preguntar a Tristán por sus impulsos sexuales, levanta el brazo.

-Miedo me das, Isma... Adelante.

-Mi pregunta es para la señora del delantal del primer hostal donde está Casandra.

La Escritora casi escupe el té.

-Mira que eres retorcido. ¿Señora?

La citada señora aparece al frente, con aspecto de estar más perdida que un pulpo en un garaje. Demasiado loco suelto y sin bozal a su alrededor.

-¿...Sí?

-¿Cómo se llama usted? -pregunta Isma con seriedad.

-Rosalinda Gonzalez -musita.

-Anda, ¿te llamas así? -exclama la Escritora sorprendida-. No lo sabía. No tenía pensado hacerte aparecer más.

-Ah... -se retuerce las manos nerviosa. Los FOBOS y los habitantes de Redención la atemorizan, por no decir que por ahí hay sueltos vampiros, ergatianos, criminales de la talla de Averno y psicópatas que nos la dan con queso.

Isma asiente satisfecho.

-¿Ésa era tu pregunta?

-Ésa era.

La Escritora parpadea despacio, pero se termina resignando. Mejor eso que preguntas spoileantes.

-Puede marcharse, señora González.

Ella se pierde entre la multitud con cautela, dispuesta a volver a su agradable hostal.

-Bueno, pues como hemos despachado esa pregunta pronto, nos da tiempo para hacer otra más.

Isma vuelve a levantar la mano.

-¿Quieres saber el nombre de algún personaje cuaternario más?

-No, quiero saber qué opina Virus sobre Chess.

-Alazarian, Isma, la gente no conoce a Chess más que de Por ti hasta la locura -suspira la Escritora.

-Eso es porque no has terminado Todos Locos.

-Ya, bueno, me atasqué. Ofrecí al interesado el leer las primeras páginas escritas, que eran bastantes. Dijo que no, que lo leería del tirón cuando terminara... y me atasqué. A mi musa no le gusta trabajar para otros a largo plazo, si no hay comentarios, no hay ánimos -hace una mueca de fastidio-. Me desvío del tema y me pongo en plan mártir. A lo que iba, la gente no conoce a Chess ni a Virus.

-A Virus sí que-

-Te callas -le chista-. No la conocen.

-De acuerdo, no la conocen. Pero ésa es mi pregunta.

La Escritora suspira y se recuesta en el atril, viciada a su té (algún día se lo fumará).

-Pues vale, pregúntale a alguien que no conocen sobre alguien que prácticamente no conocen.

Una chica joven, vestida con un uniforme FOBOS de General se destaca de la multitud y hace un laxo y pizpireto saludo marcial, las puntas de su corta melena azul eléctrico se mueven con gracia.

-Me presento para quien no me conozca: General de la división Delta, Virus. A su servicio -hace una graciosa reverencia.

-Virus, déjate de enamorar al personal y responde.

-Tan gruñona como Red -le saca la lengua-. ¿Que qué opino de Chess? -medita-. Es un buen Soldado, inteligente, malicioso y perspicaz en el grado que un Delta ha de ser... Y me gusta su pelo -sonrie e inclina la cabeza.

Al instante, como si de una innovación cibernética se tratara, su corta y decapada melena azul se tiñe a mechas desde las raíces hasta las puntas de dos tonos de morado, un claro y otro oscuro.

-Es escurridizo -continúa Virus saltando la mesa para sentarse con las piernas colgando hacia el público, su larga chaqueta de Generala ondea tras ella-, algo que a los Delta nos encanta, porque nos encanta jugar -sonríe pícara-. He de admitir que a veces se hace un poco... altivo, y que no me gusta que toque mis cosas por el tema de su poder... Pero lo compensa. Ya veréis. Mishi, mishi, mishi -se palmea las piernas encueradas-. ¿Dónde está mi gatito?

Un gatazo peludo, con los mismos colores que la melenita de Virus, salta sobre la mesa y se pasea altivo hasta ella.

-Ven aquí, anda -le agarra y se lo pone en el regazo para rascarle.

-Prrrrrrrrrrr prrrrrrrrrrrrrrrr prrrrrrrrr -hace el gato buscando caricias.

-No sabéis el gusto que da acariciarle mientras planeo mi próxima jugada -le pasa la mano desde la cabeza hasta la cola. Chess se arquea encantado.

-¡Como los malos de película! -exclama Casandra, una de las pocas presentes que capta la referencia.

-Exacto, Candelabro -vuelve a dar una larga pasada al gato-. Ahora... planeemos la dominación mundial -añade teatralmente maliciosa.

Chess se relame conforme, mirando al público con una mezcla de profunda indiferencia y una promesa de "sus voy a matar a todos".

-Mola... -murmura Casandra echando chiribitas por los ojos.

-Emmm... ¿Pregunta respondida? -quiere saber la Escritora, que no se acostumbra de haber pasado de la depravación de Redención a los desvaríos sin sentido del exterior.

Isma asiente y guarda la libreta.

-Pues vamos a tomarnos un descanso -mira su taza de té vacía-. En la siguiente sesión se responderán las tres preguntas que nos quedan y daremos por terminada esta rueda de prensa. Que menos mal que sólo me hicístéis doce preguntas, si no, no termino nunca... -rumia para sí misma.

-Si no te importa, yo también quiero un té -intervine Chesshire, convertido en un Soldado FOBOS con su uniforme negro y su melena lisa partida en dos tonos de morado; su elegancia roza la petulancia.

-¡¿Alguien ha dicho té?! -exclama Tarrant apareciendo de la nada, literalmente, ya que surge de la superficie de la mesa, pegándole un susto de muerte a Casandra, que mira debajo para ver si ve el resto del Doberman.

-Alazarian -murmura la Escritora huyendo de tal concentración de locos-. Almar lahnurek. ¡Delzek!


"-Incluso con las preguntas más sencillas arma usted unas situaciones delirantes -apreció Lord Dustington.

-Y porque nos hemos contenido con los spoilers... -murmuró misteriosa."

domingo, 20 de enero de 2013

Rueda de prensa 4

"-Se ha retrasado usted un día.

-Planes de última hora, Dusty, no me agobies. ¿Y qué fue aquello de que había que saludar por educación?

-Las maneras se acaban pegando.

-En ese caso, sera mejor que te vuelvas a la campiña inglesa -se dispuso a continuar con la escritura.

- También tengo la opción de convertirla en una señorita.

-Sigue soñando.

-Eso tendré que hacer... -el suspiro de la manta de polvo hubiera matado a treinta y siete alérgicos-. ¿Alguna noticia que darnos?

-Que va, sigo a la espera del presupuesto para Odisea. Revisando Olvido. Escribiendo Locura. Rompiéndome la cabeza para ver cómo consigo nuevos lectores...

-Suena a mucho trabajo.

-Y a nada a la vez -suspiró-. En fin, los personajes se impacientan."


-A sus puestos, nenas. Vamos, mover esos culazos -llama la Escritora.

-¿Tú qué te has fumado? -le pregunta Bufo al pasar.

-Nada, yo sólo tomo té. Y no te vayas muy lejos, que te van a hacer otra pregunta.

-¿A mí? -se sorprende-. ¿Quieren saber cuánto me mide o qué?

-Por ahí no van los tiros, pero tampoco se alejan mucho... -murmura para sí misma.

-Vamos, que me la mida. ¿Alguien tiene por ahí un metro?

La Escritora pone los ojos en blanco.

-No me jodas que no sabes cuánto te mide -cuestionó Riss escéptico.

-¿Qué te parece si te jodo y me dices cuánto me mide? -le responde con media taza de agresividad y otra media de colegueo.

-Grrrrl -ronronea Tristán relamiéndose.

-No hay para ti, maricona sádica.

Riss se desternilla.

-Lo dices como si ése fuera mejor -responde Tristán airado.

-Estoy rodeado de mala gente -suspira Bufo con teatralidad (estar con Klakla le altera).

-Que no tiene nada que ver con medidas -insiste la Escritora con ímpetu-. O quizás sí... -niega para sí misma-. Adelante, Okupa.

-¿Cómo llevas el hecho de tener admiradores pese a tus terribles actos?

-¿Admiradores? ¿Tengo imitadores?

-No, Bufo, tienes admiradores. Y muchas admiradoras entre ellos -aclara la Escritora.

-¿Admirado-ras? -se sorprende. Parpadea y se queda sin palabras-. ¿Va en serio? -vuelve a parpadear-. ¿Mujeres deformes muy necesitadas de sexo?

-Deformes no son. Lo segundo ya no... te lo puedo negar -murmura.

-Me estás tomando el pelo.

-Que no, que ahí las tienes -señala al público, justamente a unas chicas con camisetas de Team Bufo, parcartas de "Bufo, te queremos" y muchos corazones por todas partes. Ellas chillan emocionadas. Y la primera de todas es la Okupa.

Bufo tarda un par de segundos en reaccionar. Entonces sonríe malicioso con su boca de sapo.

-¿No os importa que sea obsceno y lujurioso?

Como respuesta, las fangirls chaladas alzan carteles de "Queremos un hijo tuyo", "Te dejo que me hagas lo que quieras cuando quieras" (sostenida por la chica eternamente conocida como la de "la pregunta interminable de la primera parte") y "Te como entero". La Escritora se lleva una mano a la cara, abochornada. A Bufo se le escapa una carcajada como de quien descubre que tiene el número premiado en la lotería.

-¡¡Klaaaaaaaaah!! -la loca aparece para abrazarle posesiva.

-Sí, ya, ¿pero has visto eso? Las chicas del mundo de la Escritora están chaladas.

-Míomíomiomíomíomíomíomíomíomíomíomíomío.

"Dejanoslo un poco" dice un nuevo cartel. "Se le ve que tiene fuelle" añade otro. "Te pagaremos"

-Mira, quieren que te prostituyas -la Escritora, recostada en el atril, alucina.

-Las tías de tu mundo están fatal -responde Bufo, medio ahogado por los achuchones celosos de Klakla. Y entonces le aciertan en la cara unas bragas.

Diana se acerca empuñando sus cuchillos de trinchera.

-Eh, a mí no me vengas con esa cara, que son ellas las que me lanzan la ropa interior. Por cierto, ¿de quién son? Ah, grrrl. Agh... -el estrujón de Klakla le deja con la lengua fuera.

-¿Con qué las has drogado para que estén así? -pregunta Matahombres.

-Con la droga que me sale de la punta de la p...

Klakla tira de él justo a tiempo para apartarle de la trayectoria del cuchillo, que acaba clavándose profundamente en la mesa.

-Klaaaah -le reprocha la loca.

Diana gruñe y desclava el cuchillo de un tirón, su fuerza bruta queda patente (menuda es con lo menuda que es XDDD Ok, matadme).

-Esa es la reacción que me espero yo de una tía de mi mundo. Ésa y asco, miedo...

-¿Tengo que recordarte que Klakla te quiere con locura? -le pregunta la Escritora.

-Locura, esa es la cuestión.

-A Cristina también la pones.

-Otra loca, el agobio de Redención la hace ninfómana. No es la única.

-La Alcaidesa dirá lo que quiera, pero se te quiere tirar.

-¡¿Cómo te atreves?! -brama la aludida, con un costurón en la frente.

-No, quiere que yo me la tire a ella -corrige Bufo-. Pero no se atreve a darme poder, porque sabe que acabará muyyyy mal. Y no me refiero a escozor y desagarramiento sólo -sonrie ladino.

-Atrévete a repetirme eso en mi cárcel -se abalanza sobre él.

Diana se interpone y le coloca el cuchillo en la garganta.

-Si alguien tiene que matarle, seré yo, ¿no es ése mi cometido?

-Diana, no te me subleves -advierte.

-¿No es ésa mi misión en la vida? -pregunta con un punto de recochineo-. ¿No me insistís es ello día tras día? -su tono se vuelve algo mas agresivo-. Pues no permitiré que nadie interceda en mi misión. No sólo éste, intenta matar a cualquiera de estos cabrones y te abro en canal a ti la primera -sus ojos son los de una desquiciada-. ¿Entendido?

-Por favor, tanta emotividad me emociona -Bufo se limpia una lagrimilla inexistente.

La Alcaidesa no responde, no está atemorizada, por lo menos no visiblemente, pero ha perdido la mayor parte de su liderazgo.

-Y esto es lo que pasa cuando creas monstruos, Laida, que algún día se te comerán viva -canturrea la Escritora.

-Grrr,cuando acabe con ellos no podrán levantar ni un palillo.

-No quieras saber qué te haríamos con un palillo -sisea Riss.

-Lo que sí sé es que te haría yo a ti -le responde con tono peligroso, replegándose a las sombras del fondo del recinto.

-Estas ex novias cabronas... -la Escritora niega para sí misma-. En fin, Bufo, ¿respondes?

-¿Cuál es la pregunta, si follaría esas locas de las pancartas?

-Klaaaaaaah -aprieta los labios e infla los carrillos.

-Siempre habrá de sobra para ti, mi loca -la agarra, la tumba en la mesa, se le sube encima y la morrea hasta sacarle el alma. Varias fans se desmayan del acaloramiento.

-Ejem -la Escritora llama la atención-. Parejita.

-Nada, déjalo -recomienda Riss-. Cuando empiezan así, no atienden hasta que no echan el polvo.

-Eso ya lo veremos -refunfuña agachándose para buscar bajo el atril-. Depravados y salidos por todas partes -gruñe para si misma-. Hacen que Lirio parezca una historia porno cuando la protagonista es una mojigata.

-T-tengo quince años, ¿qué pretendéis? -se defiende Casandra. (Yen Dajaev, la protagonista está en el blog de Lirio *sarcasmo*)

-Parejita, necesitáis una ducha fría -sentencia la Escritora apuntándoles con una manguera y soltándoles un chorrazo a presión que les tira de la mesa por el lado del público.

-¡Zorra! -se escucha bramar a Bufo.

-Ujijiji, otra vez -celebra por otra parte Klakla.

-Responde y os dejaré ir al cuarto de las escobas.

-A mí me vale la mesa, encima o debajo -responde él poniéndose en pie, totalmente calado.

-Encima ni se te ocurra, y debajo está Allistor.

-Nada que una dosis letal de mi veneno no pueda arreglar -se repeina con la mano para apartarse los mechones blancos que le pican en los ojos, su gesto inconsciente derrite a sus fans-. A ver, ¿qué opino de tener a unas locas salidas que me lanzan bragas? Pues que es raro de narices, jamás me lo habría esperado. Creo que las pobres están muy necesitadas.

-Es que mi sapito es muy guapo -Klakla le abraza y le da besos de periquito en la mejilla-. Es alto, ancho de espaldas... grrrgrgrgrglrll -repentinamente poseída, le sobetea entero.

-Soy verde.

"Azul verdoso" le corrige una pancarta. "Me encargué de que tu tono fuera bonito" añade un cartel particular de la Okupa.

-Klaaaaaaah, tu color es muy bonito.

-Tengo canas.

"El pelo blanco sin ser viejo mola un montón."

-Me encanta sacar de quicio.

"Eres ingenioso."

-Y obsceno.

"A veces te pasas, pero te queremos."

-Jeh. ¿Y el veneno?

"Kielan tiene el antídoto."

-Eso es verdad.

"Puedes embadurnarnos."

-Klaaaaaaaah, la mora es sólo es para mííííííííí -le trepa a Bufo y se le engancha con las piernas a la cadera, él pasa automáticamente a acariciarla como a una gata-. Frrrrrr-frrrrrrr-frrrrrrrr...

-Jefa, las tías de tu mundo están fatal.

-He de reconocer que lo del ingenio desquiciante es cierto.

-Ya, ¿nada más? Porque eres tú la que escribes, ya me entiendes -mueve las cejas, sugerente.

-¿Has terminado de responder o te puedo encerrar ya en el cuarto de las escobas?

-Me lo tomaré como un "sí" -sonríe mezquino, antes de volverse hacia sus fans-. Sigo sorprendido y no lo entiendo. Así que me gustaría que me explicarais, con calma, a fondo.

Mas desmayos por acaloramiento.

-No quiero ser uno de esos ídolos distantes y frío, prefiero ser cercano, caliente, digo, cálido... -avanza unos pasos hacia el club de fans, a pesar de llevar a Klakla enganchada como un ronroneante cinturón de castidad.

Risitas nerviosa y charcos en el suelo.

-Podríamos... intimar -susurra bajando la voz una octava.

-Eh, tigre, vuelve a tu lado de la mesa -ordena la Escritora.

-¡Nuh, es un sapo! -le corrige Klakla.

-Como quieras. Sapo toro, vuelve a tu lado del universo o mando a Diana a que te trinche.

-Jeh, con ella también quiero intimar.

La aludida ruge y se sube a la mesa de un salto, cuchillo en ristre, dispuesta a montar una masacre.

-Ya nos veremos -se despide Bufo de sus fans-. Traed algo bonito para Klakla, para que no se sienta muy celosa. Le gustan los patos.

-¡Patos! -exclama ella trepándole hasta la cabeza como una araña.

-Cuac-cuac.

-¡Cuac-cuac! -sentada en sus hombros, levanta los brazos hacia el techo como una cría.

-Otra pregunta que se nos ha alargado por tu puñetera labia.

-Ah, no haberme dado esta lengua -se regodea y se la saca (la lengua), que casi le llega hasta la barbilla.

Las fans terminan de morirse ya.

-Quien no se levante ahora mismo y friegue la que ha liado, recibirá atención médica de Allistor -advierte la Escritora.

"No, que sea Kielan, que también es muy majo" reza una nueva pancarta.

-Yen Dajaev... -suspira-. En fin, desalojad la sala hasta nuevo aviso -se bajó del estrado-. A ver si la próxima vez respondemos tres preguntas por lo menos -rumia para sí misma mientras apaga luces.


"Demonios, cómo se extiende usted con una sola pregunta.

-La culpa es de Bufo, que siempre tiene réplica.

-¿Qué ocurriría si se encontraran Casandra y Bufo?

-Algo muy chungo, porque significaría que ella ha ido a parar a Redención.

-Me refería a en este pequeño nicho donde todo vale.

-Ummm, pues si juntáramos a Casandra, Bufo y el Novato, tendría conversación para tres meses. Todos queriendo tener la última palabra... Bueno, vamos cerrando el chiringuito. A ver si en la próxima parte tengo algo que decir respecto al presupuesto que he pedido.

-Buenas noches, señorita.

-Svegrun almen, lord."

jueves, 17 de enero de 2013

Rueda de prensa 3

"-¿Alguna noticia que darnos respecto a Odisea, señorita?

-Nah, que ayer pedí presupuesto por 100 ejemplares y estoy esperando a que me respondan -jugueteó con el bolígrafo mirando hacia el techo-. Voy a morir tratando de colocarlos todos...

-¿Y la copia digital?

-Conseguir el ISBNes un mareo burocrático y. además, te pegan unas sabladas monumentales. A mí me parece un timo por muy legal que sea.

-¿Entonces?

-Entonces, si alguien quiere una copia digital, PDF, ePub o Mobi, simplemente se lo mando a cambio de tres módicos euros.

-¿En negro, señorita? -le reprochó.

-No, si te parece me hago trabajadora autónoma, pago más de 200 euros al mes y suelto 100 más para las ISBNs de las copias electrónicas. Yo no tengo la culpa de que me lo pongan tan difícil...

-No es de señoritas ponerse en plan mártir.

-Y no es de caballeros ponerse en plan preguntón. En fin, al tajo. Tengo que dejar sueltos a una panda de depravados."


-Se reabre la sesión -anuncia la Escritora adicta al té frío-. Todos a sus puestos. Preparados. Listos. ¡Ya!

-¿Tenemos que correr? ¿O corrernos? -pregunta Bufo con tono serio e inocente que malamente esconde las ganas de provocar.

-No, te quedas en el sitio, no manchas nada y respondes a la pregunta que te van a hacer. Que sé que te toca a ti -le responde ella sin alterarse, anda que no le conoce bien.

-¿Como cuánto me conoce? -pregunta Bufo con tono lascivo.

-No le hables a la narradora -le reprocha.

-¡Pero si sois la misma! Esto es un bucle muy raro...

-Pues no pienses en ello y no te dolerá la cabeza. Kastarnia, adelante.

-Uy, pero si me va a preguntar una chica -canturrea sentándose en la mesa-. ¿Qué quieres saber, bonita? -se relame cual depravado.

-¿Cómo y con quién... fue tu "primera vez"? -pregunta Kastarnia un poco nerviosa.

Él la mira atónito unos segundos, no se esperaba aquello. Después una sonrisa maliciosa se abre camino en sus labios.

-¿De verdad me estás preguntando a quién -hace una pausa dramática con los ojos fijos en ella- y cómo -amplia la sonrisa perturbada- me tiré pro primera vez?

-Sí... -responde con un ligero rubor en las mejillas y traga saliva por la mirada que la taladra.

-Que la penetra -añade él.

-¡Que no le respondas a la narradora! -le reprochó la Escritora.

-Pues que elija palabras más adecuadas para mí -responde rascándose la huevera.

-Ay, por favor... -se lleva una mano a la cara-. Retomemos el hilo, ¿vale?

-Si es que puede saberse... -añade Kastarnia, ajena a la disputa.

-Es curioso que me preguntes eso... -se posiciona mejor frente a ella, como si fuese a soltarle su larga lengua de sapo en cualquier momento-. Tengo larga otra...

-¡A callar!

-Como decía. Es curioso que me preguntes eso... precisamente tú -sonríe perverso.

-¿Yo? -pregunta ella sorprendida.

-Sí, porque fuiste tú -responde con tono sincero-. Aunque, claro... es posible que no te acuerdes por lo del...

Esquiva por los pelos el cuchillo de Diana y se desliza por la mesa para interponer una distancia prudencial entre ellos.

-¿Celosa, "Matahombres"? -le pregunta agazapado como el anfibio como el que le apodan, bajo sus pies empiezan a formarse charcos blancos-. ¿Quieres ser la única?

-Voy a librar al mundo de tu existencia de una vez -promete subiéndose a la mesa.

-Menos mal, ya me estaba aburriendo de tanto pacifismo -intervine Riss interesado.

-¿De verdad quieres pelear contra mí? -plantea Bufo preparándose para el combate-. ¿Quieres que toda esta gente vea lo que te haré si te gano?

Diana ruge y le suelta un tajo con uno de sus cuchillos de trinchera. Él lo esquiva y descarga un patada en su estómago. Ella retrocede y se resiente, pero no da más muestras de que le haya dolido.

-Lo que van a ver es cómo te abro en canal -gruñe como un animal salvaje.

El público está boquiabierto. ¡Pelea del Coliseo en vivo y en directo! Por encima de los insultos y los golpes se escucha el ronroneo de la Alcaidesa, disfrutando más que nadie. No, esperad, la que más disfruta es Klakla, que aletea como un colibrí espídico al ver a su querido en acción.

-Diana, tenemos que hablar sobre cómo se hacen las las autopsias... -intervine Kielan desde abajo.

-Doctor, cállate. Me caes muy bien, menos cuando demuestras que eres amigo de este... monstruo -termina rezumando desprecio.

-Tu amor me obnubila -responde Bufo sarcástico, rezumando veneno, literalmente.

De repente, tropieza con algo inesperado y cae hacia atrás. Alguien le retiene contra la mesa.

-No, tu estupidez te obnubila -dice Rotterdam con odio puro en cada sílaba.

Diana se acerca evitando los regueros de veneno, dispuesta a acuchillarle en el pecho. En el último instante, Bufo tira de Rotterdam y, con pura fuerza bruta, la sube sobre él. El filo del arma de Matahombres se detiene a escasos dos centímetros del cuello de la carnicera, que tiembla por una mezcla de susto y furia.

-¿Te escudas, cobarde? -le acusa Diana con desprecio.

-¿Quién dice que sea un escudo? Quería aprovechar y que te la cargaras para librarme de una vez de ella -responde malicioso, aunque por dentro está un pelín asustado, ya se veía violado en el costillar por un cuchillo de sierra de veinte centímetros-. Oye, Rotter, ¿sabes que esto es una postura sexual? -le pregunta reteniéndola contra él. A ella no le afecta el veneno ya, así que tiene que tener cuidado.

-¡Klaaaaah!

-Estoy bien, loca -responde soportando los codazos que Rotterdam le clava en los costados.

-Acabemos con esto -dice Diana, agarra a la carnicera por el hombro y, con más fuerza bruta todavía, se la arranca de entre las manos.

Bufo rueda hacia atrás al quedarse sin escudo y de pone en pie de un salto. Muy ágil para tener más de cuarenta años.

-Tened en cuenta que tengo la misma agilidad en la cama -jadea él preparándose para seguir con el combate y la Escritora ya no se molesta en reprochárselo.

Diana suelta a Rotterdam tras ella y se lanza a por Bufo. Mientras, alguien más se sube a la mesa de un salto y, de un violento empujón, manda a la carnicera hacia el público.

-¡Tramposa! ¡Klaaaaaaaaah! -Klakla se cruza de brazos enfadada, mientras su querido pelea a hostia limpia contra los cuchillos de Diana.

El público ahora tiene algo más con lo que quedarse boquiabierto. Aparte de la pelea de presos donde ya empieza a haber sangre, tienen entre ellos a otra presa tirada de cualquier manera entre las sillas después de haber sobrevolado las cabezas de los de la primera fila. Milagrosamente, aún respira.

Kastarnia se ha levantado con intención de preguntarle a la Escritora si su cuestión sería respondida, pero, visto el panorama, decide preguntar si, en el caso de que se maten allí, morirán en la novela.

-Nah, no se van a matar, no les dejo. Pero les gusta jugar -responde recostada en su atril y da un sorbo de té frío-. Además, en el fondo se llevan mejor de lo que aparentan -cuchichea confidente-. Que no se entere la mala perra.

De mientras, uno de los cuchillos de Diana ha volado también hacia el público. Alguno de los presentes lo recoge como trofeo, sin reparar en la sustancia blanquecina y algo rosacea que cubre la empuñadura. El listo de turno se derrumba envenenado y otro, éste listo de verdad, le quita el cuchillo usando un trapo como precaución.

-¿Te puedes creer que este es un día de trabajo cualquiera para mí? -le pregunta la Escritora a Kastarnia y se bebe los restos del té. Frunce el ceño-. ¡Eh, hora de dejar de jugar! -les ordena y los dos combatientes dejan de intentar matarse-. Se me ha acabado el té, así que aligerad con la respuesta.

Jadeando, Bufo y Diana se separan. Él se sienta en la mesa con las piernas colgando hacia adelante, se repeina y se adecenta la ropa. Ella se baja de la mesa por el lado del público y camina hacia ellos con paso vacilante.

-Eh, devuélveme mi cuchillo y no me obligues a utilizar el otro -le dice al segundo listo, que se lo tiende con cautela y huye al fondo de la sala acongojado por su mirada desquiciada.

Después, Matahombres regresa a la mesa y se acerca a Kielan. Le tiende el brazo al doctor y él le inyecta una dosis de rotterdamina para quitarle el envenenamiento.

-Buena pelea -aprecia Bufo limpiándose la sangre de la cara.

-Bah. Podría haberte castrado si no nos hubieran interrumpido -responde Diana tumbándose en un sector apartado de la mesa para descansar. Romu la abanica.

-Claro, claro -acepta condescendiente-. Veamos, ¿por dónde...?

-¡Eh! ¡¿Qué ha sido ese buen rollo?! -brama la Alcaidesa surgiendo de entre los conferenciantes.

Bufo la agarra por la nuca y le estampa la cara contra la mesa con violencia, embadurnándosela de paso con el veneno derramado.

-Toma buen rollo -le espeta soltándola y se vuelve hacia Kastarnia cambiando su expresión  de sadismo por otra más alegre-. Veamos, querías saber cómo fue mi primera vez -se rasca una ceja-. Esta vez sin coñas, ¿no?

Ella asiente y vuelve a sentarse en su sitio. A nadie le importa que Rotterdam siga escorgorciada por ahí.

-Fue una zorra, una guarra -murmura con desdén.

-Cuidadito con lo que dices -le advierte Diana levantando un cuchillo.

-Tú no la conociste. Esa tía era la hija de unos ricachones, salía de fiesta casi todas las noches, se emborrachaba y se iba a la cama con cualquiera.

-Eso explica porque te desvirgaste con ella -interviene la Alcaidesa con intención de minarle. Por suerte para ella, los años en el infierno la han hecho resistente a golpes y venenos.

-Jeh. Inténtalo otra vez, eso no ha dolido -le salpica con veneno a los ojos. Puede que no la deje fuera de combate, pero pica-. ¿Quieres que dé más detalles? -suspira aburrido-. Fue hace mucho tiempo.

Kastarnia asiente interesada.

-No fue bonito. Había llegado a Sirán huyendo de una acusación de violación en mi pueblo y estaba precisamente...

-Espera -le corta Riss sentándose junto a él-. ¿Cómo que acusación de violación si no te habías desvirgado todavía?

-He dicho que acusación, no que lo hiciera -le mete una colleja-. Es una larga historia y no me han preguntado con ella. Eso saldrá en la biografía que tiene pensada la jefa -señaló vagamente hacia el atril-. Como iba diciendo, precisamente estaba intentando encontrar a una tía tan borracha que no le importara liarse con un tío verde. Y la encontré.

-Klaaaaaah -Klakla surge para abrazarle y besuquearle-. Yo no tengo que estar borracha, porque te quieeeero.

-¡Eh, un momento! -exclama la Alcaidesa con tono de "¿Cómo que buen rollo?".

-Tu no has visto nada -Riss la golpea mandándola al suelo y remata con una patada-. Eh, rarito, toma un regalo -le dijo a Allis, que seguía escondido bajo la mesa.

-Gracias, tío -alarga el brazo hacia él y efectúan un masculino y cómplice choque de puños.

-Siempre un placer patear a esta zorra. Pero no hablábamos de mi ex, sino de la tuya.

-Si es que pueda considerarse que fuera mi novia. La buscaba cada noche, esperaba a que se emborrachase tanto que se volviera más insoportable y patética de lo ya era, esperaba a que la rechazaran, la consolaba hasta que se le pasaba el cabreo o la depresión, me la tiraba en algún callejón y la acompañaba a su casa. Un plan de novios genial -remata sarcástico con Klakla aferrada a su cuello.

-No me creo que no hubiera tíos que no aprovecharan para...

-Los había, de vez en cuando. Si es que aguantaban sus gritos de niñata consentida y muy borracha. Pero ellos no la llevaban a casa -se encoge de hombros.

-Estás hecho todo un caballero -bromea Riss.

-Mi sapito es un gentelman -Klakla le cubre el cuello y la cara de besos.

-Para, para... O te haré cosas sucias aquí mismo...

-Ujijijijiji.

-¡Eh! -la Alcaidesa surge de debajo de la mesa con un línea discontinua cruzándole la frente de sien a sien, con toda la pinta de "cortar por aquí"-. ¿Desde cuándo vosotros os queréis tanto?

-Vuelve aquí -Allistor la agarra para obligarla a volver a desaparecer bajo la mesa.

-¡Pero usa un sedante para que no se mueva tanto! -le grita Kielan como los viejos en las obras-. Ais, carnicero...

-¿Y cómo acabó la cosa? -se interesa Riss.

-Mal. Fue mi primera violación de verdad y no he vuelto a verla -se encoge de hombros.

-Pero si te la tirabas todas las noches, ¿cómo iba  a ser...?

-Todas las noches no. Cuando se liaba con otros gilipollas, luego me ponía pegas.

-Ya, pero...

-Eso no es lo que me han preguntado -le interrumpe Bufo-. La chavala quiere saber mi primera vez. Pues fue en un callejón asqueroso, con una tipa muy borracha y petarda. Lo demás, se lo preguntáis a la jefa, que tiene ese relato paralelo tan majo con todas mis virtudes.

-Pues ale, nos ha costado, pero ya hemos respondido otra pregunta -dice la Escritora mirando su taza vacía de té-. Vamos a tomarnos otro descansito.

Una chica se pone en pie con el brazos en alto.

-¿Sí, Okupa?

-Yo tengo una pregunta.

-Pues déjala para luego.

-Es que está relacionada con lo que se acaba de hablar.

-¿Otra pregunta para mí? ¿Quieres conocer los datos escabrosos o documentarte a fondo sobre el tema? -le hace un sugerente movimiento de cejas que provoca que la muchacha se lleve las manos a las mejillas y suelte un "ehehe",  y también provoca que Klakla le achuche tan fuerte que le estrangula mientras le "klaklea"-. Pero si sois... la misma... aghhjjhj...

-¡Pero si no nos parecemos en nada, klaaaaaaaah!

-Como ves, no están en disposición de responder nada sin pegarse un revolcón antes, así que...

-No, si la pregunta es para ti -se adelanta, turbada por las cejas de Bufo.

-¿Para mí? Bueno, espero no extenderme.

-¿Para cuándo "Caída al abismo"?

-Ah, eso...

-¡Ey, mi biografía! -exclama Bufo-. Eso, ¿cuándo sabré a cuántas tías me he tirado?

-Has perdido la cuenta. Y ese relato paralelo es para un futuro. Un futuro lejano e indefinido -da el tema por zanjado-. Se cierra la sesión. Id al baño, tomad café, desfogaos. Nos vemos luego -huye de la sala de prensa cual político entrenado.


"-Menos mal que le hicieron pocas preguntas, señorita. O nos tiraríamos aquí hasta el día del juicio final.

-En la triscadeca no tenemos de eso -respondió frotándose los ojos-. Demasiadas horas frente a la pantalla.

-¿Pero usted no escribía a boli en folios?

-Esto... Tengo que devolver unos vídeos -huyó de nuevo, en otro plano existencial."

martes, 15 de enero de 2013

Rueda de prensa 2

"-En fin, al tajo.

-Señorita, ¿no va a comentar nada respecto a que acabe de terminar de revisar Odisea?

-¿Qué voy a decir, Dusty? No es más que un paso de los muchos que tengo que dar. Cuando tenga la copia digital al menos ya lo notificaré. Ahora, rueda de prensa de estos tarados."


La Escritora regresa a su atril con una taza de té negro con naranja, da un trago al líquido frío y se aclara la garganta.

-¿Todos en sus puestos? -pregunta y de ambas partes, conferenciantes y público, le responden con un grito de guerra que ya quisieran vikingos y espartanos con el pecho al descubierto-. Perfecto. Comencemos. ¿Siguiente cuestión? Y concretad un poco para que no nos tiremos aquí otra hora.

Un chico con perilla larga y melena atada en una coleta levanta el brazo.

-Adelante, Isma.

-Tengo una pregunta para Tristán.

Hay un murmullo en los conferenciantes y le dejan espacio en la zona redencionesca.

-Si la pregunta es si me acostaría contigo, la respuesta es sí, guapetón. Grrrrl -responde Tristán.

La Escritora suelta un suspiro resignado. "Ya empezamos con las depravaciones" se dice. Pero el que ha preguntado no parece molesto.

-Claro, porque soy divino -responde sin atisbo de humildad-. Pero, a lo que iba. ¿Que se te pasó por la cabeza para violar a todos esos presos? -añade con tono profesional, sin asomo de vergüenza.

-Depravados... -canturrea por lo bajo la Escritora.

-La culpa no es mía, sino de los cuidadores, que los visten como putas -responde Tristán y se queda tan ancho.

Hay un forcejeo cuando Bufo intenta apuñalarle con uno de los cuchillos de Diana y ella lo intenta recuperar, al tiempo que Tristán se protege con su tridente y el resto de la gente se aparta o jalea.

-¿En serio, Tristán? -pregunta la Escritora alzando las cejas.

-¿Eh? -aún con el tridente dispuesto a ensartar a quien se le subleve, se vuelve hacia el atril y después hacia el público, en especial hacia el chico con perilla-. ¿Queréis una respuesta seria? Qué pesados, macho. Está bien, coge una libreta y apunta -se sienta en la mesa cuando se asegura de que Bufo ha dejado de intentar abrirle en canal y se limita a fulminarle con la mirada-. ¿Que qué se me pasó por la cabeza? -se coloca en pose de pensador interesante-. Veo que no sabes que, en realidad, la mente de un hombre puede llegar a ser muy simple.

-Esa frase me resulta preocupante, teniendo en cuenta que te ha preguntado un hombre... -murmura la Escritora y da un sorbo a su té frío.

-¿Nunca has oído eso de que pensamos en sexo cada siete minutos? -continua el redentor como si no la hubiera escuchado, y como si fuera un profesor de filosofía de la universidad (no le querríais tener de profe, a saber qué hay que hacer para aprobar)-. Pues combina eso con un redentor sexualmente reprimido recién llegado al Infierno. Mala combinación, ¿no crees?

Isma asiente y toma apuntes. (Seguro que tú sacarías sobresalientes con el profesor Tristán, pillín).


"-Señorita, ¿no cree que se está pasando?

-¿Por lo que dice Tristán? Porque ahora va a ir a peor.

-No, por lo que le insinúa usted al público.

-Bah, sé que les va la marcha. A todos. ¡Todos locos!"


-Yo no siempre fui así -continúa Tristán con teatral nostalgia-. Cuando entré a trabajar aquí era más introvertido y, sobre todo, cohibido.

-¡Claro, yo tampoco quería! -le bramó Bufo-. ¡No te jode, puto sádico maricón!

-¿Es que sigues enfadado por nuestras sesiones? -le pregunta con desdén, para añadir con malicia-: Pues bien que gemías.

-Por el dolor, so capullo. A ti nadie te quiere, te desprecian como a mí las tías. Deberías estar en la celda de al lado -le gruñó agresivo.

Desde el público llegan algunos cuchicheos femeninos que suenan raros, como a... ¿admiración? Bufo pierde el hilo de sus insultos al escucharlo. Además, otro de los conferenciantes, el llamado Maniquí enrojeció y boqueó como si las palabras le quemaran en la lengua, pero no dijo nada.

-Claro, claro -dice desdeñoso-. ¿Por dónde iba? Ah, sí -asiente para sí mismo y retoma su monólogo-. Supongo que por un lado tenía que desahogarme para soportar el trabajo. Todos esos gritos, toda esa desesperación... -su vista se pierde en el infinito-. Era demasiado para mí.

Mientras Tristán habla, la Alcaidesa tiene una sonrisa amplia y perversa, se está regodeando con la historia. Es precisamente ese tipo de reacciones las que busca día a día en su cárcel.

-Y, claro, me encontraba a los hombres sometidos a mí... Era demasiada tentación como para contenerse. Así que empecé a abusar de ellos -confiesa como si nada-. No es algo de lo que me sienta especialmente orgulloso, pero tampoco me quita el sueño por la noche -se encoge de hombros-. Aparte de que no todos oponían tanta resistencia como pueda creerse, hasta alguno se dejaba...

-Según me han contado, usar drogas no vale -le recriminó Bufo, caustico.

-Tanta insistencia me lleva a pensar que te gustó -le responde muy seguro de sí mismo-. En fin. ¿Mi respuesta ha sido satisfactoria? -pregunta con un exceso de petulancia.

Isma asiente, dándose por satisfecho y guarda la libreta.

-Estupendo. ¿Alguna otra pregunta antes de la pausa para ir al baño? -insta la Escritora mirando al público.

La primera chica levantó la mano de nuevo.

-¿Sí, Luli? Ya sabes lo que pasará si te excedes otra vez, ¿no?

-Esta vez es sólo para Dämon -aclara.

El aludido se sorprende y da un paso al frente, quitando de en medio a Tristán de un violento empujón.

-¿Qué quieres?

-Aparte del cambio estético, ¿la mano te afecta de alguna manera? Es decir, ¿te duele o así?

Dämon hace una mueca ácida.

-Pica -responde quitándose el largo guante que le llega hasta el codo, descubriendo su piel renegrida.

-Creo que tengo una cura para ello -interviene Kielan-. No te quitaría las... características adquiridas, pero dejaría de picarte y deshacerse así.

-Estupendo, ¿cuándo dices que te pasas por Redención? -le hace un gesto con la diestra y de ella cae un polvillo tan negro como el resto de su brazo-. Porque yo no puedo dejar el trabajo -dice con un punto de malicia.

-No está en mis planes volver por ahí todavía. ¿Qué te parece si quedamos en un lugar neutro, con tu hermana como mediadora?

-Aléjate de ella o te despedazo con estas uñas tan majas que me han salido gracias a ti -hace la ola con las cuchillas de azabache.

-Técnicamente fuiste tú el que...

-¡Técnicamente una mierda! -se lanza a por él con malas intenciones.

-¡Eh, a calmarse todos! -ordena la Escritora.

-Preguntabas si me afecta de alguna manera -repite Dämon mientras sujeta a Kielan con la siniestra y le amenaza con la diestra-. Pues sí. Desde hace un tiempo me tienta destrozar unas cuantas caras usando estas preciosidades.

-Me alegra saber que te gusta el cambio -dice Kreuz sin alterarse por el peligro.

-Si quieres destrozar caras, podrías... -empieza la Alcaidesa.

-Arrancarte todas las putas vísceras por el puto culo -termina Dämon y sus palabras sacan murmullos, risitas y exclamaciones por parte de los habitantes de Redención-. No trates de arrastrarme a tu juego, zorra.

-Ya veremos -murmura sombría y sádica.

-Si, ya veremos -suelta a Kielan de un empujón y se vuelve hacia él público-. ¿Algo más?

-No, con esto va bien -responde Luli.

-Perfecto. Pausa para aliviar la vejiga y tomar un café para volver a llenarla -dice la Escritora yendo a servirse más té.

"-Ea, pues con esto tenemos hasta otro día.

-Menuda forma de enrollarse tienen.

-Es lo que tiene cuando la gente interacciona -se encogió de hombros-. Y cuando lo escribo yo -reconoció resignada."

domingo, 13 de enero de 2013

Rueda de prensa 1

"-Buenas noches, señorita. Ya era hora de que volviera, ¿no?

-Y da las gracias de que anoche leyera ese blog tan gracioso que me devolvió la fe, Dusty.

-Es usted muy dada a bajones, ¿no?

-Y a sacar aspiradoras.

-Yamecallo."

(Aviso: las respuestas que se den tendrán el nivel spoileador de haberse leído Odisea y los relatos paralelos publicados hasta la fecha. Si no habéis leído algo, es posible que os llevéis alguna sorpresa, quién sabe. Si sabéis de más, no seáis cabrones y callaos lo que sepáis, como los personajes que mientan descaradamente.)

La panorámica en un poco extraña en la sala, hay más conferenciantes que público. Los pobres llamados a declarar tienen que apiñarse, compartir silla y sentarse unos sobre las rodillas de otros, lo que, en algunos casos, resulta peligroso y dramático, a la par que cómico.

-Bien, ¿ya estamos todos? -pregunta la Escritora en su atril y recibe murmullos de toda clase por ambas partes-. Me lo tomaré como un sí. ¿Primera pregunta?

Una chica en la primera fila levanta la mano.

-Yo querría saber qué opinan de Redención.

-Por favor, ¿nos dices como te llamas? Es para saber qué poner en tu tumba por si te linchan por meter el dedo en la llaga. Ya sabes, simple formalismo.

-Luli -responde sin mostrarse demasiado preocupada por la opción. De hecho, parece entusiasmada de que alguno de los maromos, digo, personajes masculinos, se lance a por ella.

-¿Y a quién diriges tu pregunta?

-A todos.

-A todos, eh -suspira la escritora-. Esto va a ir para largo. A ver, empecemos por la tropa -se vuelve hacia la mesa de los conferenciantes.

-Yo no la conozco -responde Casandra-. Por suerte. Pero he oído que es un sitio muy chungo. Aunque... si van tipos con aquel al que arreé con el candelabro... -añade con tono de "entonces supongo que ni tan mal".

Sus palabras producen todo tipo de reacciones entre la gente que la rodea, desde firmes defensores hasta desquiciados que la quieren morder. La quinceañera se acerca a Diego, por si las moscas.

-No he estado allí ni ganas que hay -responde Amanda.

-El puto Infierno -contesta Diego sin cortarse un pelo, y recibe otro coro de reacciones, entre risas y afirmaciones.

-No sé, sin estar allí no puedo opinar -dice David con una de sus amplias sonrisas-. Pero supongo que es un lugar donde hay que tener mucha fortuna para salir bien parado.

-Paso de hablar de ese sitio -gruñe Víctor.

Una risa malévola surge de una esquina, de la que se aparta la gente instintivamente. Se oyen rechinar dientes furiosos.

-¿Algo que opinar, Elzay? -pregunta la Escritora con dureza.

-No sé qué tenéis en contra de ese lugar -responde un hombre maduro, trajeado, de aspecto pulcro, elegante y educado-. Para mí fue un paseo muy cortito -añade con una sonrisa galante que rezuma suficiencia.

-Gracias por tu opinión, ¿alguien más?

La multitud amontonada tarda unos segundos en dejar de emitir vibraciones de odio y terror hacia Averno.

-Personalmente, estoy hasta las pelotas de estar en esta puta cárcel -responde Bufo-. Klakla podría sacarnos, podría hacer un túnel a base de mordiscos, pero no quiere hacerlo y no lo entiendo, joder. ¿Puedes explicármelo tú? -le reta agresivo.

La Escritora desvía la mirada, hay cosas difíciles de explicar, sobre todo a los personajes que tienen que sufrirlas.

-Klaaaaah, ya te he dicho que en Redención estás más seguro.

-¡Mis cojones!

-Yo me lo paso bien -opina Riss divertido-. Un poco claustrofóbico, pero nada grave -se encoje de hombros.

-A mí me resulta un poco aburrido -interviene Uriel.

-Yo quiero salir... -musita Loidoria flotando a una distancia prudente de cualquier persona-. Salir y secar a ése hasta la muerte -añade con más dureza y un punto de demencia, señalando a Averno, que se limita a alzar una ceja.

-Puede que haya matado gente y eso sea ilegal -intervine Diana vehemente-, pero no se puede decir que esté mal. Se lo merecían. Y se lo merecen muchos más, que están ahí fuera, libres, convirtiendo en un infierno la vida de niñas y mujeres indefensas. Tengo que salir, no por mí, sino por ellas. Tengo muchos cuellos, tripas y entrepienas que rajar.

-Algún día tienes que explicarme en qué momento dejaste de hablar como una paleta -considera la Escritora.

-Me lo han pegado mis compañeros de piso -se encoje de hombros.

-Supongo que en Redención no siempre te cambia para peor -interviene Kielan-, no en todo al menos.

-¿Entonces tu opinión es...?

-Que es un caldo de cultivo donde puede surgir de todo, desde infecciones mortales hasta curas milagrosas. No es el mejor lugar del mundo, pero no sería el que soy sin esa experiencia.

-Claro, como a ti la mala perra te trata mejor por ser su médico cura-marionetas -le echa en cara Bufo.

-¡¿Qué me has llamado?! -brama ella.

-Cuidado, guarra, que aquí no hay cristal de por medio -le advierte malicioso el hombre azul verdoso.

-¡PEGALAAA! ¡DALE UNA PALIZAAAA! -grita como una posesa una chica con uniforme FOBOS muy recortado.

La Escritora chifla para hacerles callar. Unas descargas eléctricas después, la gente está más calmadita.

-¿Dónde está Allistor?

-Debajo de la mesa -informa Kielan-. Planeando convertirnos a todos en sus esclavos zombis.

-Encantador... -murmura sin emoción-. ¿No tiene nada que decir?

-¡Eh, carnicero! -llama el doctor-. Sal, que la jefa quiere que respondas.

-Redención es un asco, porque no me dejan hacer lo que quiero -responde asomando su cabellera larga negra-. Mucho maltratar presos, pero luego no me dejan hacer unos experimentos que tengo en mente.

-Tu eres gilipollas -le espeta la Alcaidesa-. En mi cárcel se hace lo que YO quiero. Y tus experimentos matan a la gente demasiado rápido.

-Grgrggr. Ya he respondido, no me molestéis más -Allistor se vuelve a esconder bajo la mesa-. Ya veréis cuando seáis mis esclavos y yo decida quién vive y quién muere -se le escucha rumiar.

-¿Alcaidesa? -pregunta la Escritora.

-¿Que qué me parece mi cárcel? Que se puede mejorar todavía -sonríe maligna.

-Disfrútala mientras puedas -canturrea un hombre maduro vestido de chatarrero, sentado sobre la mesa, sin importarle la cercanía de Averno.

-Romu... Algún día te pillaré -gruñe la mala perra.

-¿Alguien más? -aligeró la Escritora, a quien la respuesta se le está haciendo muy larga.

-¡Klaaaaaah, klaklaklakla! -pía Klakla agitando los brazos y girando sobre sí misma-. ¡Es divertido!

-Es mi patio de juegos -ronronea Tristán sonriendo lascivo (asumamos que su mirada también lo es, pero no lo podemos saber a ciencia cierta, porque su flequillazo nos hace barrera).

-Tiene sus buenos momentos -reconoce Dämon-. Pero es un poco agobiante estar bao tierra, a la mala perra me dan ganas de masacrarla, a Tristán le castraría al estilo de Diana y tengo que andar con cuidado para no involucrar a mi hermana.

-Bueno... no me gusta -interviene Krob, la FOBOS con uniforme recortado-, pero hay gente maja...

Hay un pequeño jaleo cuando tienen que sujetar a otro Doberman rubio para que no exprese su admiración hacia Redención, físicamente y a hostia limpia sobre la Alcaidesa y quien se le ponga por en medio.

-Zak, cálmate. ¿Alguien más?

Una redentora cegada levanta la mano.

-¿Sí, Cristina?

-Preferiría estar ahí fuera, pero aquí tengo tengo sexo en cantidad -responde sin reparos-. Y algunos son unos viciosos depravados -ronronea a continuación.

Bufo emite un silbido y de inmediato es placado por Klakla, posesiva. De mientras, un preso al que llaman Maniquí, se sonroja al tiempo que lanza miraditas a Tristán.

-Esto es un pozo de depravación sin fin -murmura la Escritora-. Resumiendo, es un infierno, pero algunos sabéis divertiros. Yuju. ¿Siguiente pregunta? Cortita, por favor, que esta se me ha hecho larga.

Luli vuelve a levantar la mano.

-También quiero tu opinión.

-¿Yo? Pues si soy la que ha creado todo esto, se supone que... todo lo que han dicho ellos, más lo que no han dicho los que esconden cosas. Es un lugar horrible, están todos tarados, hay mucha depravación, pero como ya ha dicho la mala perra, podría ser peor.

-¡No me jodas, hombre! -exclama Bufo, con Klakla agarrada cual koala-mochila a su espalda.

-¿Me lo dices a mí o a Tristán?

-Perra...

-Yyyyyy, me voy a tomar un té. Seguimos después de la publicidad, digo, del descanso. (Es decir, otro día) -anuncia bajándose del estrado y se acerca a Luli-. Otra pregunta más como esa, y te mando a Averno, Riss y la mala perra por tu compleaños, ¿de acuerdo? -pregunta con una sonrisa tan amplia como sardónica, y tan luminosa como las llamas del infierno.

-¿Tengo llamas? -exclama la Alcaidesa-. Ah, sí, las de la incineradora que pulveriza los cadáveres.

"-Menudo percal... -murmuró Lord Dustington.

-¿Verdad? Reza para no encontrártelos -le recomendó dando un sorbo a su té frío."

miércoles, 2 de enero de 2013

Cumpleaños

Que el calendario theudiano sea lunisolar lo hace bastante irregular. ¿Qué ocurre con los cumpleaños? Pues que el año que naces, el calendario gregoriano (el normal) y el theudiano coinciden de una forma que, al año siguiente, ya no se da.

Por ejemplo, mi cumpleaños serías así:

Nací el 2 de julio de 1989.

Aquel año, ese día coincidía con... *consulta sus notas* 14 de Gaaremanen (la diosa Flora, sí XD Podéis consultar los apuntes de religión)

A partir de entonces, que vuelvan a coincidir las fechas... algún siglo de estos. Por eso este año cae en 6 de julio. (Yuju, doble cumpleaños XD)

Así que, si queréis saber cuándo sería vuestro cumpleaños theudiano, sólo tenéis que decirme la fecha completa (el año es muy importante) y yo os lo calcularía en un momento. ¿Que para qué sirve esto? Pues... principalmente para hacer el chorra, como todo. También os puedo felicitar vía blog un día que seguramente el resto de la gente no lo hará XD Además, así nos sumergimos un poco más en el mundillo este :3

Aprovecho para recordaros que voy a hacer una "rueda de prensa", de hecho será la próxima entrada, y que si tenéis alguna pregunta, no lo pospongáis más.

Laotgor.


"-¿Cumpleaños theudiano? ¿No está yendo un poco lejos, señorita Escritora? -cuestionó Lord Dustington.

-Bah, ¿por qué no? Es curioso, ¿no crees?

-Creo que es una locura, pero si lo dijera, usted sacaría la terrible aspiradora. De modo que me parece una excelente idea -respondió con elegancia.

-Buen montón de polvo."